Desde el inicio de la historia de la humanidad se han repetido ya millones de acontecimientos que hasta el día de hoy traen un protagonismo grande, marcado, por quien comanda y un silencio inmenso, casi sepulcral del papel de las personas, como grupo y como ejecutores de las decisiones, a la vez que reos, victimas, carnes de cañón y todas las acepciones que se pueden incorporar, en una mayoría aplastante de los casos.
Cuando todo ha cambiado en el Mundo con relación a las comunicaciones, al transporte, a las ciencias, a la tecnología aplicada a todos los quehaceres y en general sobre la inmensa mayoría de las preocupaciones, aun hoy la mayor parte de los habitantes del planeta sufren de una u otra forma, injusticia.
En el último periodo de tiempo, por ejemplo los últimos 100 años, ha ocurrido un despegue brutal del desarrollo aunque fraccionado y frenado por conceptos que atrasan, han ocurrido conflagraciones mundiales, guerras, enfermedades, catástrofes, reconocimientos y pérdidas de derechos ciudadanos o sociales por los que se pueden responsabilizar a pocos hombres y sufrido, enfermado, precarizadas sus vidas o muerto, muchas muertes, millones de personas lo que incluye a mujeres, niños y ancianos.
En el siglo 21 y en correspondencia con el profundo y real saber de los problemas y sus causas por una cantidad de individuos jamás antes informada al respecto. Debería reinar más la libertad, desaparecer las distancias entre lo que se invoca y los intereses verdaderos, habría que cuestionarse cuántas veces se les pregunto a los que más le murieron, perdieron su hábitat, propiedades, trabajo, vida como la conocían, si estaban de acuerdo con el conflicto al que marchaban sus hijos, hermanos, padres o amigos, que ventajas les granjearon y/o cuantas veces fueron resarcidas las familias de las víctimas de las luchas por la democracia, por la liberación, por vencer o sufrir a los “malos”, etc. No obstante cuando se venció o conquisto se hizo para obtener ganancias determinadas en un porcentaje mayoritario, ganancias materiales que al final quedaron en un exiguo grupo.
Las sociedades según sus enseñanzas, criterios y decisiones se han fragmentado con formación de facciones que se identifican con:
-Quien detenta el dominio de los recursos, la economía o lo que rinda gozo, dinero y facilidades, porque no se juega, sino que se apuesta al poder sin dudas ni titubeos.
-Y otros, o los que consideran que deben apoyar a los que no lo han sido, los que no tienen recursos, los que sufren marginación o violación de sus derechos como persona y/o grupos sociales. Sumiendo en torbellino de confusiones las ultimas decadas plagadas de verborrea, rapida, larvada, vertiginosa, arrojadiza de conceptos cuya base es la repeticion y su objetivo su grupo y no la sociedad. Donde todos como mayoria han quedado desfraudados.
Los gobiernos que han sentado sus bases para representar exclusivamente o con carácter fundamental a una de las dos agrupaciones, no han tenido los resultados de permanencia, economía solvente y progreso. En algunos de estos casos la economía ha sido solvente. Pero reagrupando la riqueza de forma desmesurada hacia un exiguo sector y empeorando las condiciones del otro.
En el siglo XXI debiera existir una forma de gobierno o de elección del mismo en la que no se repitiera el circulo vicioso, “quítate tú para ponerme yo para robar de lo mismo”, generando crisis económicas y sociales de todo tipo por mala administración y corrupción. Conviniera que el rico porque sabe serlo, hacer crecer sus riquezas y el trabajador porque sabe hacerlo, recibir lo suficiente para vivir dignamente y los pequeños y los ancianos tener derecho a la mejor atención y seguridad basados en el aporte de los dos grupos anteriores a la sociedad. En la formación profesional y social correspondería tener acceso a una apertura de mente que reñida con una educación exclusivista sin que esta fuera vetada, dotara a la pública que se imparte de los conocimientos necesarios más avanzados para poder dirigir las ramas fundamentales de la sociedad, la ciencia y la economía por el universo estudioso.
Gobekli Tepe 2
En el siglo XXI sería un jalón para el desarrollo, para el progreso de la humanidad hacer una reflexión sobre las líneas rojas que hacen que los ciudadanos tengan que limitar sus libertades y posibilidades según quien detente la autoridad, poder, jefatura, gerencia, cabeza de religión o filosofía. Estamos en determinados aspectos peor que cuando Nicola Tesla quiso promover energía eléctrica sin hilos y quien lo patrocinaba apareció diciendo que él no iba a aportar nada para Tesla dar energía eléctrica gratis al mundo (perdiendo así no solo la posibilidad de hacer algo extraordinario sino de un mega negocio que pudo generar un dominio espantoso). Así sucede en muchas cosas que no solo tienen que ver con el dinero y la ganancia económica y atrasan tanto como la inquisición en su tiempo y otras políticas restrictivas.
En el siglo XXI quien gobierna debiera ser un grupo de funcionarios apto, preparado y profesional, fuerte e inteligente, a la cabeza de las personas organizadas a diferentes niveles, con la asesoría-tutoría de especializados y expertos sometiendo su acción y ejecución de forma periódica a espacios más ampliados, consultando en plebiscito con la frecuencia que sea necesaria asuntos, propuestas y/o decisiones a la población.
Grupo que convendría estar obligado a decidir como Dios mando a gobernar con total equidad y sabiduría, no como iglesia sino como un representante de mujeres y hombres libres que respetan las leyes que ellos mismos crearon, las cumplen y obligan su cumplimiento a la vez que preservan en su continuidad desde todos los modos posibles.
Sumerios 2
En el siglo XXI corresponde acabar con:
- Las manipulaciones de los mercados, los que sin los artefactos, manejos y falacias introducidos por algunos en sus mecanismos, siguen siendo instrumentos de innegable valor en funciones desde el siglo XV.
-Las guerras, y los negocios que las generan con innegable agresión para la seguridad de las regiones donde se ejecutan, generando migraciones masivas, y las consecuencias que destrozan el entorno humano asi como su desarrollo produciendo en las localidades alcanzadas cuadros como los del Guernica o de las Bombas Atomicas lanzadas en el siglo XX, sin olvidar los cuadros de masacres desoladoras de las guerras anteriores.
-Los bloqueos, embargos y climas de belicosidad encubierta o no que impiden la tranquilidad, el crecimiento y aumentan el estrés y los sufrimientos de poblaciones inocentes, lo que frena y cierra las aperturas que una sociedad o nacion está obligada a cumplir.
No se debiera aplicar la ley con conceptos y normas según las ideas o doctrinas de los sometidos a juicio, análisis, o investigación, si conforme a la letra y hechos con la verdadera presunción de inocencia, avalado por el estudio profundo de las motivaciones del supuesto delito.
En el 21 no deberíamos necesitar ser de izquierdas ni de derechas, el funcionamiento de un estado tiene mas importancia que un viaje estelar o a los confines de la galaxia (a no ser que el mundo se esté acabando realmente, pero para ir todos), le vendría adecuado tener una compulsión y respeto científico no avalado por corrientes de pensamiento, maquinaciones de todo tipo u otras, sino por las instituciones, llámense centros de estudios, universidades, institutos, que mejores resultados de vanguardia hayan tenido en sus trabajos, con una vocación de totalidad. Seria justificado aspirar y exigir que la mejor, más justa, más eficiente, inteligente y más alta forma de administración fuera aquella destinada al cuidado y desarrollo de la población y la sociedad humana.
Hay países que tienen recursos hidrológicos y minerales, hay otros con contenido humano altamente preparado y disposición genuina de crecimiento.
Quien no explota los recursos de todo tipo y los convierte en otros complementarios del país, encalla y hace crisis su economía y planes de desarrollo.
Quienes no rescatan, reconocen y estimulan a su capital humano donde quiera que este esté, se queda sin los frutos de una experiencia enriquecida, variada por diferentes geografías, sociedades y economías, que es propia por su origen mismo, sembrando el camino de escollos que retardan, frenan los logros y comprometen la fluidez del progreso, a la vez que hacen pactos con lobos que no se identifican con el amor, el recuerdo y la nación en su conjunto sino que acechan la fruta madura.
No correspondería en el 21 ser necesario o beneficioso ser del sur o del norte, del este o del oeste, blanco, negro, indio o asiatico, lo que haría falta es tener acceso a todo lo que se debe y sea una necesidad o un derecho, no necesitando ser de, o ir a, ningún otro punto para mejorar o ganar la vida, ni pertenecer a corrientes grupales que no sean las que en ejercicio de plena libertad se escoge.
Así sería posible poner fin a un circuito reverberante casi eterno que ha convertido lo que es LA TIERRA, “Un Edén” con todas las posibilidades de vida paradisiaca, en un sitio que de acuerdo a como le entremos no sabemos si estamos en el purgatorio, o en el infierno, sin encontrar un oasis estable, porque ahí cuando menos nos lo esperamos también, asaltan a alguien por quien menos se espera, dan un tiro, cae una bomba, tumban un edificio, o entra una enfermedad de la que teniamos informacion pero dejamos las preparaciones para otro momento.
Muchas gracias.
